Tunja, 01 de septiembre de 2015
SEÑORES:
JUNTA DIRECTIVA DE ASOBARES - CAPITULO BOYACÁ
E.S.D.
Doctor:
CAMILO OSPINA GUZMAN
Presidente Asociación De Empresarios de Bares de Colombia
E.S.D.
Señores:
PROPIETARIOS Y TRABAJADORES DE ESTABLECIMIENTOS
REF: RENUNCIA A PRESIDENCIA DE ASOBARES - CAPÍTULO BOYACÁ
Cordial saludo,
Para mí ha sido todo un honor y orgullo el haberme cruzado en mi camino con personas como el Doctor Camilo Ospina Guzmán presidente nacional de ASOBARES COLOMBIA, con quien compartí de forma inmediata sus deseos de trabajar desinteresadamente por nuestro gremio, dignificado nuestra actividad y exaltando el aporte que como industria del entretenimiento hacemos en la generación de empleo en nuestro país, así como la contribución económica que debe dirigirse a las arcas de los recursos públicos de la nación y que gran parte de ella es destinada a la salud, la educación y el deporte de los colombianos, su labor a nivel nacional fue inspiradora en las tareas que a nivel local hemos adelantado en Boyacá y especialmente en Tunja; estoy seguro que de igual forma sucedió en todos los departamentos y municipios donde hoy como ASOBARES tenemos presencia; por tal razón siempre tendré gran admiración y agradecimiento hacia el doctor Ospina.
En el trabajo local, que desarrollamos sobre todo en la capital del departamento de Boyacá, agradezco inmensamente la confianza depositada en mí durante todos estos años, por cada uno de los miembros de ASOBARES – BOYACÁ, propietarios y trabajadores que siempre estuvieron dispuestos a respaldar los álgidos debates a los que tuvimos que enfrentarnos y que me escogieron como uno de sus principales representantes para llevar las riendas de nuestra agremiación. Igual es mi sentir con los gremios y empresas aliadas que respaldaron los reclamos y nuestras propuestas ante diferentes escenarios, a todos sin distinción alguna reitero mi gratitud, pero en este punto es apenas justo resaltar la labor y acompañamiento de mis compañeras y compañeros de junta y miembros más activos, que durante todo este tiempo fueron los mejores asesores y amigos sin quienes no habría sido posible obtener los modestos logros que a la fecha hemos alcanzado, para Fredy Padilla, Camilo Ojeda, Claudia Corredor, Milton Torres, Blanca Guevara, Alberto Burgos, Pedro Saavedra, Armando Ávila, Álvaro Godoy, Rosa Aura Páez y Andrés Londoño les hago un reconocimiento especial, pues repito, sin ellos hoy nuestra asociación no tendría la proyección que hemos labrado.
Gracias al grano de arena que cada uno de nosotros aportamos, conseguimos ganancias fundamentales para la existencia de nuestras empresas, como fueron la resistencia ante las políticas represivas que fuimos objeto por parte de algunas administraciones municipales; el fortalecimiento y profesionalización como agremiación.
Abrimos un espacio sumamente importante en el H. Concejo Municipal de Tunja, donde luego de años de lucha logramos el respeto por el derecho al territorio y éste se materializó en la Modificación Excepcional que sobre el P.O.T. se dio el año pasado y donde Asobares junto con otros sectores como CAMACOL, la Sociedad de Ingenieros y Arquitectos de Boyacá, Juntas de Acción Comunal y la Academia, jugamos un papel por demás activo y el cual hoy recoge sus frutos. Si bien esa modificación no es perfecta, considero que es el avance más significativo que hasta ahora hemos obtenido, pues además de lo señalado, deja también una guía para que otros sectores económicos como las licoreras, de forma organizada realicen sus reclamos y se profesionalicen, lo que aportará en la unificación de toda la cadena económica (taxistas, bares, restaurantes, licoreras, comidas rápidas, empresas de logística, etc.), labor en la que también Asobares ya ha adelantado trabajo.
Ha sido también muy importante, comunicarle a los tunjanos que nosotros NO afiliamos todo tipo de establecimientos, sino solo aquellos que quieren trabajar dentro de la responsabilidad social empresarial y que además hacen todo sus esfuerzos por armonizar la convivencia con los sectores residenciales que por supuesto existen en nuestra ciudad, a ellos les reiteramos nuestro compromiso de trabajar de la mano para la preservación de la tranquilidad ciudadana, creemos férreamente que hablar del orden público no desentona con la generación de empleo que tanto requiere nuestra ciudad. A su vez reconocemos que existen algunos establecimientos por fuera de Asobares, que poco interés tienen en estas causas y que desde siempre quienes hacemos parte de esta agremiación hemos invitado para que funcionen dentro de los límites que nuestro derecho a la libertad nos permite, es decir, sin atropellar los derechos de nuestros conciudadanos.
Aunque tuvimos un pequeño éxito en materia de horario de funcionamientos (hablando exclusivamente de bares y restaurantes), no deja de existir represión en las políticas municipales que en esta materia se han dictado, razón que debe motivar al crecimiento de nuestra organización y nuestra lucha, para que ojalá en breve tiempo la Alcaldía de Tunja honre su palabra y deje de dilatar los pactos de convivencia que tanto anunciaron por medios de comunicación hace ya varios meses y que a la fecha no son otra cosa que una promesa incumplida, lo que ha generado efectos negativos, pues esas disposiciones exageradamente restrictivas han empujado a gran parte de los empresarios a utilizar figuras jurídicas como arma de aguante a las mismas, prueba de ello es que esta administración entrega a la ciudad más cantidad de clubes nocturnos de los que recibió y aquí vale la pena detenernos para dejar sentada nuestra opinión sobre los mismos. Los clubes y similares son producto de los horarios indignos a los que se somete al comercio local, son una forma de resistencia ante tales andanadas, lo malo no es la figura en sí misma, lo malo es el abuso que algunos propietarios le dan, cosa que NO sucede en todos estos lugares (con quienes también se deben articular acciones) y que lastimosamente podrían suceder en cualquier otro lugar sin importar cual fuere su razón social. Allí radica en gran parte la responsabilidad de quienes continúan en la junta directiva, en mantener estándares al momento de decidir el ingreso de nuevos asociados.
Ya que he mencionado los pactos de convivencia que se vienen dilatando por parte de la administración municipal, bien vale la pena decir también que la propuesta que radicamos, la realizamos y suscribimos conjuntamente con la naciente Asociación de licoreras y los casinos Paradise, a quienes les agradezco su disposición en esta área y con quien auguro más trabajos conjuntos en pro de la productividad de Tunja, esa propuesta, también tuvo consideración con los establecimientos que hoy no pueden abrir los días domingos y lunes festivos como consecuencia de las regresivas políticas ya mencionadas y que se han pedido reversar para que no sigan afectando a los empresarios y trabajadores que de allí dependen y a quienes invito a respaldar este común proceso.
En nuestra industria, Tunja es para Boyacá lo que es Bogotá para Colombia, lo que quiero decir con esto, es que las políticas aplicadas en la capital del país tienen efecto en el territorio nacional, e igual sucede con Tunja y Boyacá. Lograr reversar medidas represivas en la ciudad de Tunja, de seguro tendrá incidencia en lo que sucede con el comercio de otros municipios como Duitama, Sogamoso, Chiquinquirá y Villa de Leyva, para mencionar apenas unas. Allí también es víctima el comercio local de situaciones similares a las que hemos afrontado en Tunja y es por eso importante exaltar la labor en que modestamente hemos contribuido en la creación de organización y que vienen desarrollando personas como Eduardo Camacho en Duitama, o Luis Pinzón en Villa de Leyva quien ya consiguió voz en CORTUVILLA, personas que desde su territorio, estoy seguro que trabajaran en la misma defensa de los derechos que nosotros venimos promulgando. Sobre Chiquinquirá expreso mi solidaridad con quienes hacen parte de la economía nocturna y que hoy ven gravemente afectadas sus empresas y trabajos debido a la opresión de que son víctimas por parte de la administración municipal de esa ciudad y a todos y cada uno de ellos, como a quienes representan, le comunico nuevamente nuestra plena disposición en sumar esfuerzos para el crecimiento organizativo gremial, para lo que se hace necesario incrementar nuestros procesos de unidad y acción.
En este escrito apenas mencioné algunas de las labores más sobresalientes que desde mi cargo como presidente he tenido la fortuna participar, para informarle a todos los lectores, mi decisión de renunciar a la presidencia de Asobares Capitulo Boyacá, e invitarlos a respaldar la presidencia en encargo que el señor Fredy Fauricio Padilla (actual vicepresidente de Asobares Boyacá) va a desempeñar mientras se nombra una nueva junta directiva, es nuestro deber rodearlo y apoyarlo en la misma manera en que lo hicieron conmigo.
Renuncio a mi cargo como presidente, mas NUNCA he de renunciar a mi defensa del trabajo, la producción, el comercio y el empresariado nacional, en esa labor continuaré en el espacio que ustedes tengan a bien proyectarme; ya considero que estos son pilares fundamentales para la transformación que necesita nuestro país y por supuesto Tunja.
Renuncio a mí presidencia también, porque junto con ustedes hemos considerado que mis esfuerzos se desarrollen en otro frente, de mayor resonancia y donde a la fecha hemos tenido algunos buenos amigos, pero no un doliente propio que defienda nuestras causas (que no son otras que el desarrollo de nuestra ciudad), como solo un doliente directo podrá hacerlo y sin tapujo alguno.
Renuncio también porque otras personas merecen la oportunidad de dirigir nuestra asociación aumentando nuestra expansión como gremio, ampliando nuestra perspectiva e indagando en procesos nuevos como la creación de nuestra cooperativa, para poner un solo pero importante ejemplo.
Renuncio para darle claridad a la opinión pública en general, que Asobares NO es una organización política sino que es netamente gremial y consecuentemente con ello mi proseguir aunque es impulsado por la gran mayoría de integrantes y aliados, no compromete políticamente el nombre institucional.
Renuncio porque como comerciantes, trabajadores y empresarios, somos también tunjanos que merecemos opinar en todos los temas concernientes a nuestra ciudad.
Y renuncio, en medio de un sentimiento de nostalgia e infinita gratitud con cada uno de ustedes, rogándoles sumo cuidado con nuestra asociación que es el hijo que con la puja de todos hemos dado a luz, pero del cual aún nos falta guiarlo para que crezca de forma correcta.
No obstante, en mi carácter de miembro del gremio sigo ligado a las banderas Asobares y a la defensa de la reivindicación de nuestros derechos. Desde donde esté, seré un soldado más en esa causa. Puede tener la seguridad el comercio tunjano que el espacio en donde estaré será una tribuna de crítica y de denuncia de las políticas retardatarias, en particular de las atinentes a Tunja, pero además una palanca de apoyo a las movilizaciones y justas contiendas que adelanten todos los sectores sociales y productivos que las enfrenten.
Amigas y amigos, con seguridad nos seguiremos encontrando en el camino común por cambiar a la Tunja presente, en una ciudad digna y autónoma. Es el comienzo para construir una sociedad justa y hacia el progreso general.
Fraternalmente,
DAVID RICARDO CONTRERAS ALVAREZ